Vertidos de aguas residuales
Campo de Criptana no dispone aún de un sistema de tratamiento, depuración y reutilización de las aguas residuales.
Hace varios años, las aguas del municipio eran conducidas a unas balsas de decantación el sur del pueblo que al menos realizaban un primer filtrado, pero el ayuntamiento decidió abandonar dichas balsas con la intención de enviar las aguas a una planta de depuración en Alcázar de San Juan. Sin embargo, tal planta no esta preparada para asumir tal incremento en el volumen de aguas, por lo que durante todo este tiempo las aguas se están vertiendo sin ningún tipo de tratamiento al arroyo de la carretera del puente de San Benito que desemboca directamente en el rio Záncara. Estas aguas residuales son tóxicas y pueden provocar graves daños ambientales en los cultivos por los que transcurren.
Aunque, ante la insistencia de los grupos ecologistas, el ayuntamiento ha prometido reiteradas veces que iban a resolver el problema, lo cierto es que todavía se siguen produciendo los vertidos.
Mientras tanto, las antiguas balsas de decantación están abandondas, tal y como se puede apreciar en las fotos adjuntas.